Casas de Hermandad en el Rocío

Diseñada para la convivencia, la Casa de Hermandad se conforma por partes que con el tiempo han ido encajando entre sí hasta formar un conjunto sereno que cumple, sin concesiones,  su función principal de servir de soporte a la vida fraterna durante el tiempo efímero de los tres días de Romería. Su arquitectura se muestra abierta al reciclaje funcional, pues desde hace más cuarenta años, igualmente se utiliza para la celebración de las Colonias de verano que la Hermandad organiza para más de doscientos niños provenientes de ambientes familiares difíciles y cincuenta jóvenes monitores que los tutelan durante quince días.

Composición

La Casa se compone de dos edificios contiguos conocidos por los Hermanos como “patio antiguo” y “patio nuevo”, separados por una calle de servicio. Aunque construidos en épocas diferentes, ambos siguen el mismo patrón estructural en el que a los invariantes de la aldea marismeña, construcciones de baja altura y densidad con espacios sencillos dispuestos a múltiples formas de utilización, se unen  elementos de la arquitectura popular de los corrales de Triana, como las galerías abiertas de acceso a los cuartos o habitaciones.

La Casa antigua y principal se sitúa con fachada al Real del Rocío, orientada hacia la ermita de la Virgen, mirando a poniente. Presenta un volumen sencillo de una planta de altura con cubierta a dos aguas y porche delantero. Desde una perspectiva frontal, nos encontramos en primer lugar, ante el denominado Patio de Baile, zona diáfana de recepción junto a la que se sitúa un espacio destinado a cobijar la Carreta del Simpecado durante la Romería, rematado por una espadaña con campanario ornamentado con cerámica trianera. Este habitáculo se utiliza también en las peregrinaciones ordinarias como altar para el Simpecado antiguo.

Tras el salón se accede a un pequeño patio pavimentado al que abren por su derecha una sala para atender representaciones, y por su izquierda la denominada “Casa del Hermano Mayor”, conjunto de habitaciones utilizadas por miembros de la Junta de Gobierno durante la Romería. Una cocina industrial y grupos de aseos públicos completan el equipamiento. Seguidamente se encuentra el patio de carretas, espacio que se abre en forma de embudo con piso natural de arena, construido mediante arquerías de gran altura sobre pilastras dimensionadas a escala de las carretas, cuya planta superior dispone de una serie de habitaciones equipada con baño para el descanso de los Hermanos en Romería, albergando a los niños de las Colonias de verano durante el periodo estival.

La Casa o patio nuevo se construye con un esquema semejante, dando su fachada principal al espacio que se conocía antiguamente como Eucaliptal y recibe en la actualidad el nombre de Plaza de Doñana

Finalmente señalar que el inmueble descrito tiene restringido su uso al culto, la formación espiritual y la obra asistencial caritativa, como pilares sustentados en el amor a la Santísima Virgen del Rocío.